Es importante nuestra labor como gestores de memoria ya que con el pasar del tiempo son muchos acontecimientos que se pierden o ignoran entre generaciones y más en un país como el nuestro; un país que no hace memoria ante sus problemáticas más grandes y marcadas, como lo ha sido el conflicto armado y lo que desenvuelve esto en los territorios, donde son en muchas ocasiones lugares estratégicos y que no hay un acompañamiento debido por parte de las entidades gubernamentales.

Por eso es crucial hacer entender a los habitantes de nuestros territorios, que son sus comunas, municipios, sus historias, su voz, sus hechos los que permiten reflejar esa otra cara frente a estos panoramas ya estigmatizados en muchas ocasiones; los que manifiestan que están en desacuerdo con lo que siempre se hace ver y como cada uno como persona aporta su grano de arena en el momento de elaborar esas historias que se tocarán en las obras, partiendo desde sus memorias individuales a un plano comunitario y así fortalecer las raíces de nuestros territorios.

A pesar de que hay gestores de memoria durante la historia, siempre quedará algo que no fue dicho o fue silenciado, es por esto que debemos centrar nuestros objetivos al momento de memorar algún acontecimiento, ¿qué se busca y quiénes están directamente involucrados? Pues a nivel general se hacen referentes oficiales partiendo solo de la memoria nacional, es decir desde acontecimientos en la historia de un país y cómo estos se vuelven arquetipos y referentes pasando por hechos históricos, elaborando así un tejido social que siempre va ligado a un contexto sociopolítico para una comunidad en general.

En muchas ocasiones esto solo obstruye la verdad, pues al elaborar una historia siempre se hace énfasis en unas cosas y se descartan o ignoran otras, es por esto que podemos pensar que nuestra historia esté manipulada con actos y personajes heroicos; que no está mal, ya que son verídicos y cuentan con la realidad de los hechos históricos, pero se omiten acontecimientos haciendo a un lado las otras problemáticas puntuales en los territorios que cabe aclarar no son las mismas que se demandan en un plano global, hablando de lo nacional a lo municipal.

Es por esto que como gestores de memoria debemos fortalecer esos lazos partiendo desde nosotros mismos y cómo aportamos a ese crecimiento a nuestras memorias comunitarias, haciendo el papel de brújulas guía, para fomentar ese enfoque e interés por mejorar, así plasmar un recuerdo en nuestros territorios desde lo artístico, para generar ese impacto que buscamos en el aspecto social de nuestra Colombia; desde un nivel micro que serían nuestras localidades (comunas, municipios) hacia un mejoramiento de la memoria colectiva en ese aspecto macro como lo es Colombia, un país que hace guerra para obtener paz.